9/17/08

Crónica de una muerte anunciada

Quizá es problemático comentar de un tema sin proveer el contexto. Por ende, voy a tratar de proveer una cronología del escándalo de los bonos chinos. 

A finales de agosto, bajo presión, Arias revela información parcial sobre los bonos que se habían emitido en enero. El 2 de setiembre se reconoció que un intermediario tico privado manejó los bonos. Nótese que la revelación fue por un recurso de amparo presentado por La Nación.

En una entrevista genial publicada el 3 de setiembre, Antonio Burgués, el embajador de Costa Rica en China, intenta dar explicaciones de por qué ser co-dueño del banco que custodió los bonos vendidos a China (el BCT) no es un conflicto de intereses...  Mi parte favorita es cuando dice y desdice cuándo fue que supo el rol de BCT (se supo ese mismo día)

El 6 de setiembre, por resolución de la Sala Cuarta, Hacienda revela formalmente las condiciones del contrato de los bonos. Resulta que no hay comisiones explícitas y que la tasa es un 2% y que SAFE (una entidad que administra los fondos de reserva chinos, que hoy rondan los $1.7 trillones) era la contraparte china.

Jorge Guardia en su columna del 9 de setiembre pone el dedo en la llaga, puntualizando que el problema fundamental de todo el asunto es el aparente intento de evadir los controles de la Asamblea Legislativa que normalmente deberían operar en una emisión de deuda externa. Además, hace el ligamen a la licitación de celulares 3G que había sido adjudicada a una empresa china y luego tuvo que ser declarada desierta. 

Para terminar de embarrialar el asunto, resulta que el director del BCIE, Alfredo Ortuño, que se sabe muy allegado al presidente Arias, también estuvo involucrado en este enredo. Juan Manuel Villasuso en particular destaca la omnipresencia de Ortuño en cuanto escándalo hay:
Este banquero ha sido protagonista en la creación de un fideicomiso con la plata taiwanesa del Ministerio de Vivienda, ha contratado músicos y funcionarios públicos para la Casa Presidencial, así como asesores del SÍ para el referendo del TLC, ha tramitado préstamos para urbanizaciones de familiares y hasta ha conseguido visas para empleados de empresas de telecomunicaciones. En verdad no sabíamos que un representante ante el BCIE tuviera tantas y tan variadas atribuciones.
Y bueno, había gente incómoda desde el principio, pero no fue hasta que la Nación se puso en la jugada que todo esto se destapó. Supongo que mejor tarde que nunca.

No comments: